Comenzó en 1944. Cada cañizo costaba 7 pesetas y sus dimensiones 0,80 m. ancho por 2,30 m. de largo.
Se hacen con pilares impares: el más pequeño tres pilares, después de cinco, de siete, etc., siendo el más frecuente el de cinco pilares o cañas maestras.
Además de su aplicación en la agricultura y otros fines, la utilización principal de los cañizos era en la construcción, para fabricación y reparación de techumbres y cielos rasos en cerramiento de huecos y espacios. Una vez dispuestos se aplicaba yeso, hasta quedar totalmente ocultos.
Trabajó muchísimo para “Construcciones Simón”, empleándose en la construcción de las “Casas nuevas”, cine “Blas de Laserna”, Ayuntamiento, Casa Arrese, etc.
Trabajó también en el campo de aviación de Logroño, en la construcción de pabellones.
