Se propuso se pusiese en ejecución el cobrar los entráticos de los Beneficiados de las iglesias parroquiales de esta ciudad, que han entrado desde el año 1683 hasta el presente de 1688, por cuanto algunos de ellos están debiendo los 400 reales, que, de limosna dan a la iglesia a donde les toca el beneficio, entregando dicha cantidad a esta Ciudad, como patrona, de beneficios y primicia o a los primicieros en su nombre, para distribuirlos en ellas para su mayor adorno y culto, como son Don Pedro Corral, que lo dio y gastó con orden de la Ciudad en una caja de cera y en hacer dorar los pedestales de las columnas de la iglesia de Ntra. Sra. del Rosario, en su altar mayor, y otros están debiendo los dichos entráticos como son Don Atilano Virto y Don Joseph de Azcona y respecto de que ha sido costumbre inmemorial, el dar, cada beneficiado, al tiempo de su entrático, una comida espléndida a los señores del Regimiento, se hizo convenio con el Cabildo de dichas iglesias, de que en lugar de dicha comida, se diesen los dichos 400 reales, de limosna, cuyo derecho lo tiene la dicha Ciudad, constatados por declaraciones y mandatos del señor Don Joseph Navarro y García, Vicario General de este Obispado, habiendo llevado pleito con Don Francisco de Gúrpide y Don Miguel de Bienzobas, por resistirse a pagar dicha limosna, los cuales fueron condenados, habiendo parecido y dado sus razones, como consta de diferentes letras despachadas por dicho Vicario General …/…, han determinado sus mercedes pedir a los señores Don Atilano Virto, Don Joseph Azcona y Don Miguel Aznar, que son los últimos que han entrado beneficiados y están debiendo dichas cantidades.
1688-03-05 – (Cobro de limosna de los Beneficiados).
