Las franjas verticales pintadas en los ladrillos del puente, al igual que los árboles que había en las cunetas de las carreteras, se pintaban en blanco, con el fin de facilitar, en la conducción nocturna de vehículos, la delimitación de la carretera. Se plantaban árboles en las cunetas con esa finalidad.
En 1878 por orden de la Diputación Foral de Navarra, se comunicó al Ayuntamiento de Corella el deber de plantar 4.274 árboles en su término municipal, en las carreteras a Pamplona, a Tudela y Castejón a Cintruénigo.
Posteriormente con los avances tecnológicos y estudios realizados se llegó a la conclusión de proceder a su eliminación ya que en los accidentes producidos por salidas de la carretera, los vehículos impactaban con los árboles y generalmente agravaban los daños sufridos.
