La celebración de las bodas, ceremonia mediante la cual se formaliza el matrimonio, en los años 1940s hasta los años 1980s, era un gran acontecimiento social, investido de una relevante e ineludible ceremonia religiosa, por la época de que se trataba y el sentir religioso de España. El libro de familia, documento civil que reflejaba la constitución del matrimonio, era entregado en la sacristía de la iglesia por un representante del registro civil, una vez finalizada la ceremonia religiosa. ¡Era la boda por la iglesia!
Ya en los años 1990s, se va incrementando el número de matrimonios civiles, siendo no obstante mayoría los matrimonios canónicos. Los ayuntamientos han habilitado locales apropiados para estas ceremonias civiles, siendo los alcaldes y concejales delegados los que presiden y celebran la constitución de estos matrimonios.
Ambas ceremonias comparten su posterior celebración en un restaurante con familiares y amigos, con su correspondiente banquete y posterior sesión de baile. Las celebraciones se realizan tanto a mediodía como a la tarde, según se opte por que el acto central sea comida o cena.
Qué lejos quedan las bodas celebradas a las siete de la mañana y su posterior chocolate con churros y pastas en el café-restaurante, donde debido al “racionamiento” de alimentos, las pastas las aportaban las familias.
Los años 1930s hasta 1950s fueron años muy difíciles, además de la guerra civil española, sufrimos la II Guerra Mundial y la postguerra fue muy dura, por la escasez de alimentos.
En las actuales bodas el número de invitados incluso ronda de los 300 a 500 comensales.
Los cambios experimentados en la sociedad española son evidentes, disponiendo actualmente de una ley que permite la unión de dos personas del mismo sexo, y también a esta unión, la ley la define como matrimonio. Por matrimonio siempre hemos entendido la unión de hombre y mujer; entiendo que, pasada esta reciente fiebre modernista, se modificará esta denominación ya que es evidente que ambas uniones no son idénticas, aunque puedan tener similares derechos.