Eugenio trabajando en la acera enfrente de su carretería. Estaba situada junto a la actual bajera donde se ubica, por fiestas, la Peña El Tonel.
En la fotografía se observa la casa de Micaela y Emilia Catalán Escribano y al fondo el chalet de Sres. de Guinea.
Cuando se realizaba la colocación de cerquillos de hierro a ruedas de carro, era en la Placeta de la Abadía donde se organizaba la hoguera para dilatar los cerquillos y poder colocarlos en el exterior de la rueda. Su ejecución era un espectáculo pues precisaba la ayuda de cuatro o cinco vecinos. Cuando se habían dilatado con el fuego, entre varios lo sacaban del fuego y colocaban sobre la rueda de madera; rápidamente se echaba agua para que se enfriase, ajustase y no quemase la madera de la rueda.
En ocasiones, se asaba algo en el fuego, para “aprovechar el fuego” y sobre todo, principalmente en época de fríos, se cogía lumbre para los braseros de los vecinos.