Con motivo de ausentarse de esta Ciudad, la Maestra María Santos Caballero, se acuerda se le abonen las cantidades que se le adeudan, deduciendo de su importe las contribuciones pendientes. Se acuerda la exención del pago de contribuciones extraordinarias de guerra al Médico titular Mariano Arbial, con la obligación de visitar a cualquier destacamento o fuerza del Ejército, que se encuentre en esta Ciudad de estancia o tránsito. Se acuerda fijar la patente sobre el regaliz, fijándola en 1.500 reales anuales, con prohibición a los vecinos de vender ese artículo a personas en comisión fuera de esta localidad, castigando al infractor con el rigor de la ley.
