Se informa del oficio del Jefe Político de la Provincia y los informes del arquitecto José Nausía, sobre las iglesias de San Miguel y la de la Merced. En su vista el Ayuntamiento determina colocar unos maderos, en la salida y entrada de la calle del Santísimo, para impedir el paso de carros. Así también entrevistarse con el Vicario de San Miguel para que desde el púlpito, prevenga a los feligreses del estado de la iglesia y que se retiren de la parte que comprende toda la nave de la derecha que es donde se encuentra el peligro y que el Sr. Párroco traslade el Santísimo al altar que considere conveniente. Todo esto, sin embargo de continuar practicando las formalidades mandadas por Decreto de 4-12-1845, respecto a la recomposición de las Parroquias, activando estas diligencias cuando se posible. En cuanto a la iglesia de Ntra. Sra. de la Merced, autorizar a su Mayordomo, que en vista de lo que observe, tome las precauciones que considere convenientes.
1847-04-17 – (Medidas sobre Iglesia de San Miguel).
