Estando juntos los señores D. Juan Pablo de Yanguas e Iñiguez, D. Pedro Nolasco Sagaseta de Ilúrdoz, D. Saturnino Aguado y Payán, Andrés Arellano y Galarreta, Pascual Soriano y Gregorio Cueva, Alcalde y mayor parte del Regimiento de la misma, dijo su Señoría que, entrando por el camino carretil y puente del río Alhama, hay un portal que se denomina de San José y que más adelante, en la inmediación de la Plaza del Mercado y embocadero de la calle Mayor, existe otro (Santa Teresa) que anteriormente, por un costado estaba unido a la casa que fue de D. Manuel Arnedo, y por el otro lado a la de D. Francisco Sales Virto de Vera, y encima hubo una fábrica (habitación) que sirvió de cárcel para las mujeres, y con el transcurso del tiempo, tanto dicha fábrica como la casa de Arnedo, han ido sucesivamente deshaciéndose, de modo que ya no ha quedado más lo que lo que forma el arco, por un costado separado de toda fábrica y por el otro arrimado a la casa de D. Francisco Sales Virto; como dicho arco está expuesto a derrumbarse, se hace reconocer por el Prior y Veedores de edificios, informando de que el Portal de San José está bastante desplomado (desnivelado, que no está a plomada o nivelado) y está expuesto a que pueda caerse, y el próximo a la Plaza del Mercado, tiene grandes grietas en la pared que hace ahora frontis a casa de Dª Josefa Morales y el Vínculo (granero público) y en el intermedio está la entrada a la calle Mayor que está bastante desplomada, de la cual arrancan los dos arcos, e igualmente el frontis que da a la Plaza, también está desplomado; en cuya vista y para evitar los perjuicios que podrían ocasionar el desplome de dichos arcos y al mismo tiempo hermosear, en cuanto sea posible, la entrada a la Población, ya que el próximo a la Plaza del Mercado causa bastante fealdad, se acuerda el derrumbe de ambos portales supliendo el gasto el Depositario Interventor, quedando los materiales en beneficio de la Ciudad y que se solicite facultad al Real y Supremo Consejo.
1818-01-19 – (Demolición Portales de San José y Santa Teresa).