Entre otros asuntos, convocadas las panaderas Antonia Navarro, Josefa Liroz, Isabel Igea, Eufemia Sierra, María Magallón, María Martínez Angós, Josefa Sesma, Melchora Cervera y María López, se trató sobre la cantidad de pan que debían dar por cada robo de trigo de la nueva cosecha y se acordó en 16 panes de a 3 libras navarras, por cada robo. Se acuerda el arreglo del camino que va a Bardón y la limpia de la poza de dicha fuente, que se usa como lavadero de ropa, y se encomienda a Juan Josef Arigita, maestro de obras, realice reconocimiento y calcula la cantidad necesaria para su composición.
1795-11-01 – (Acuerdo con las Panaderas. Arreglo camino y limpia fuente de Bardón).