Entre otros asuntos, se hace presente que, como personas propuestas para recoger y vender al público, los vientres y demás piezas de las reses matadas en al matadero, (menuderas, triperas y tripicalleras), están nombradas Sebastiana Garbayo, mujer de X. Salcedo, Francisca Mateo, viuda de Gregorio Ximénez, Thomasa Martínez, viuda de Manuel Diago y Josepha Lázaro, viuda de Bernardo Virto, y que deben vender en la forma siguiente: el vientre o menudo de carnero, que se compone de sangre, tripa, asadura y las dos manos a real fuerte y 9 maravedíes, de modo que aunque pagan al arrendador 1 real fuerte, les queda de beneficio los 9 maravedíes restantes. También, 1 asadura a 12 maravedíes; una sangre a 19 maravedíes; las 2 manos, 6 maravedíes; la tripa, 10 maravedíes, entendiéndose esto cuando cada cosa se vende por separado. El vientre o menudo de oveja, con inclusión de la cabeza que va de aumento para igualar su estimación con el carnero, lo venderán a real fuerte y 9 maravedíes. La cabeza de oveja a 14 maravedíes; una asadura 10 maravedíes; una sangre a 16 maravedíes; las 2 manos, 4 maravedíes; la tripa, 8 maravedíes. Una libra de sangre de oveja o carnero, 6 maravedíes. La cabeza de carnero, que va por separado del menudo, a 19 maravedíes. La lengua y sesos de vaca o buey, real y medio, y vendiéndolos por separado, los sesos 18 maravedíes y la lengua, 1 real. Cada mano de vaca, 16 maravedíes y el pié, 8 maravedíes. La lengua de cebón y sesos, 1 real y 24 maravedíes, y vendiéndolos por separado, los sesos 19 y la lengua 41 maravedíes. Cada mano de cebón, 20 maravedíes y el pié 12 maravedíes. Habiendo hecho comparecer a las referidas Sebastiana Garbayo y demás nombradas, se les hizo presente el arancel de precios, para que los cumplan sin exceder, advirtiéndoles bajo las penas al arbitrio de su Señoría.
1790-05-20 – (Sobre venta de vientres y menudos).
