Entre otros asuntos, se acordó que el domingo primero viniente, día 20, a las 6 horas de la mañana, se vaya en procesión a la Basílica de Santa Lucía. Que ningún vecino que echare a vender vino por taberna, ponga ramo de olivo, y el que lo tuviere puesto lo quite, bajo la pena de 4 reales, y que se haga saber por bando.