Se acordó que, respecto de la carta que se ha recibido de su Majestad (que Dios guarde), participando la muerte de la Reina ¿Viuda?, (creo se tratará de Mariana de Austria) y ser preciso hacer las exequias, honras y demás, según lo ejecutado en otras ocasiones, se recurra a pedir permiso a los señores del Real Consejo, para gastar lo necesario.
