“En la Ciudad de Corella, jueves a seis de octubre del año mil seiscientas sesenta y siete, dentro de las casas de dicha Ciudad y sala de acuerdos de ella, se juntaron en acuerdo los señores Pedro Fernández García, Alcalde y Juez Ordinario de dicha Ciudad por su Majestad; Martín Serrano, Miguel de Ágreda y Aibar, Juan Estañán Vicente, Antonio de Muro Mauleón, Jerónimo de Gúrpide y Sáenz y Pedro de Sesma Sola, Regidores de la dicha Ciudad y estando juntos yo el Secretario infrascrito doy fe, leí desde el principio al fin las Ordenanzas Reales de este Reino del buen gobierno y a saber los mandatos que el Juez de Residencia último pasado que en esta Ciudad estuvo y dejó escritos en este libro, en cumplimiento de lo que por dicho mandato se manda en alta voz y a que a sus señorías le conste. Y en dicho acuerdo, atendido a la muerte de Francisco Pérez, Andador, por su muerte fue nombrado por tal andador, para mientras fuere la voluntad de la Ciudad a Miguel Pérez Luna, vecino de dicha Ciudad con salario ordinario y estando presente aceptó el dicho oficio; y de ello se hizo acuerdo y lo firmó su Señoría con mí, Secretario ”.