Al fondo se observan las dos torres de la Merced, la del Rosario y las dos de San Miguel.
Sobre estos terrenos del Ombatillo se han ido construyendo casetas de campo, que sirven para expansión y ocio de los corellanos.
El Ayuntamiento autorizó su construcción con unas licencias de obra específicas (creo que como construcciones agrícolas), regulando y limitando la superficie a construir y características de las mismas.
Sus propietarios las han dotado de luz y agua, pudiendo disfrutar de unas excelentes condiciones de comodidad para pasar el día, el fin de semana e incluso casi como residencia habitual, ya que incluso algunas disponen de piscina, zona de césped y huerta con hortalizas y frutales.
En la Avenida de Navarra, carretera del Villar, también se ha establecido un polígono industrial, donde se han instalando nuevas industrias, trasladándose otras que ya estaban ubicadas en diversas zonas de Corella.
En los años 1990s, en este término del Ombatillo se ha realizado la transformación en regadío intensivo de terrenos que comprenden unas 900 hectáreas, destinados al cultivo de vid, frutales, hortalizas y cereales, constituyéndose la correspondiente Comunidad de Regantes para su organización.