El sacerdote D. Jesús Jiménez “El Pocho”, en su libro “Doce estrellas para mi Madre”, recoge la anécdota atribuida al sacerdote, también de origen corellano y párroco, D. Antonio Arellano “Tabones”, que cuando se procedió a la inauguración de este busto, le indicó al Sr. Arrese “Le hemos puesto aquí delante de la iglesia de la Merced para que controle las posibles grietas”. Nadie podía imaginarse entonces el deterioro por abandono y derribo que sufriría esta iglesia en 1978, ni el recorrido del busto del Sr. Arrese por diversos lugares de Corella, hasta quedar instalado en el jardín anexo a su Casa-Museo, entre las calles del Vallejo y San Miguel, jardín construido sobre un solar originado por derribo de una casa propiedad de la casa de Arteta, en cuyos bajos estuvieron ubicadas las cuadras de caballerías de la Casa de Arteta.
0000-00-00 – Plaza de la Merced. Jardín con el busto de José Luis Arrese.
