Una vez suprimido el impuesto de Garapito, se aprueban las bases para la recaudación del impuesto sobre el vino, debiendo pagar 1 maravedí ó 5 céntimos, por cada cántaro, al año.
Una vez suprimido el impuesto de Garapito, se aprueban las bases para la recaudación del impuesto sobre el vino, debiendo pagar 1 maravedí ó 5 céntimos, por cada cántaro, al año.